Quizá eres uno de esos que dice que es un día comercial o que el amor se debe celebrar a diario. Para mí es un día muy especial, ya que recuerdo como mi padre demostraba ese día a mi madre su amor a través de algún detalle y por supuesto siempre nos solía caer algo a mi hermana y a mí, así nos demostraba en ese día su amor. Qué mejor manera de rememorar el amor que celebrándolo un día y así hacer algo más especial.
En este mundo loco que nos llena de estrés y de obligaciones, se nos olvida muchas veces la importancia del amor, esa gran medicina de la que ya os hablé. El amor es magia y como toca celebrarlo vamos a hablar sobre él.
CÓMO SURGIÓ EL CELEBRAR EL 14 DE FEBRERO
El 14 de febrero se celebra el Día de San Valentín, día en el que se celebra el amor. Curioseando por internet he descubierto que esta festividad se remonta el siglo III en Roma, donde un sacerdote llamado Valentín se opuso a la orden del emperador que prohibía la celebración de matrimonios para los jóvenes, considerando que los solteros sin familia eran mejores soldados. Valentín, opuesto al decreto del emperador, comenzó a celebrar en secreto matrimonios para jóvenes enamorados.
Al enterarse, el emperador le sentenció a muerte a San Valentín, el 14 de febrero del año 270, alegando desobediencia y rebeldía. Por este motivo, se conmemora todos los años el Día de San Valentín.
¿Verdad que es precioso?
EL AMOR ES PURA MAGIA
Ya lo decía Dante “Hay un secreto para vivir feliz con la persona amada: no pretender modificarla”.
El amor cuando llega sabes que está ahí, se da muy pocas veces, pero cuando se da eres consciente rápidamente.
El verdadero amor es aceptar a quien llega tal y como es, sin necesidad de cambiar nada, sin nada que quitar ni nada que añadir. El amor es puro amor, no es algo que hay que introducir con calzador, si no te corresponde con su amor, sal corriendo.
El amor no se halla en nosotros para sacrificarlo por el otro, sino para disfrutar de su existencia. Por tanto hay que dejar de tener mitos sobre el amor, de tener falsas expectativas. Te voy a dar unas pequeñas claves para el buen amor:
EL AMOR ES UNA DANZA
En la pareja se dan una serie de bailes relacionales, las danzas del amor. Cada pareja en un determinado momento danza de una manera. En algún momento uno te lleva y el otro se deja llevar, donde en algún momento la sensualidad y la confianza es imprescindible para que la danza se de, porque si eso no se da el baile no sale.
Cuanto más rico sea el baile relacional, más feliz nos hará la pareja. Con el baile relacional, danzamos a través del amor para dar a tu pareja lo que tú le puedes dar y lo que la otra parte quiere o puede recibir. Existen todo tipo de danzas: materno filial, paterno filial, la danza erótica, la de la amistad, la pasional, la danza tóxica, etc.
La pareja que va a funcionar mejor es aquella que mantiene una danza adulta, aquella que no espera del otro que sea su padre o su madre, aquella que además se flexibiliza entre las diferentes danzas en función de lo que la vida les está pidiendo.
Es importante que se den la danza de la seguridad y de la creatividad para mantener viva la llama del amor; saliendo de los estereotipos, sobre todo los que dicta la sociedad o la familia a la que perteneces.
EL AMOR EVOLUCIONA
El amor pasa por diferentes grados de amor según Alejandro Jodorowsky, de esta manera la danza va evolucionando:
Lo importante es no descuidar los distintos grados de amor. El amor es un encuentro. El amor sabe a quien ama, no hay que forzarlo.
Pero ahora te pregunto: ¿Sabes amar? Suele ser lo que más me encuentro en consulta, personas que no saben amar. Pero para eso nunca es tarde si quieres aprender, sólo tienes que ponerte a ello, trabajar para conseguirlo, hacer una buena terapia y llegar a la mejor danza del amor con tu pareja.
“Yo me perdono la vida todos los días” “Cada día que amanezco me pregunto por qué se fue” “Cuando veo a mi nieta pienso en lo que se está perdiendo” “No paro de hablar...
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