5 CONSEJOS PARA TRATAR A LAS PERSONAS TÓXICAS EN EL TRABAJO

Hoy te hablo de las personas tóxicas.

Qué complicado es mantener la motivación, las ganas, el entusiasmo… cuando acudes al trabajo con ansiedad, sin ganas de cruzarte a alguien, buscando la forma de evitarle.

Cuando tu clima laboral se ve enrarecido por culpa de algún compañero tóxico tienes que encontrar la manera de mantener tu rendimiento sin dejar que esta persona afecte negativamente. Pero ¿cómo? Hoy te hablo de cómo identificarles y te doy 5 consejos para que puedas tratar con personas tóxicas en el trabajo.

¿Te encuentras con pocas ganas de aguantar a algún compañero de trabajo?

¿Cada vez que le ves intentas poner una excusa?

¿Te quedas sin energía ante ciertos comentarios?

¿No soportas que te controlen continuamente?

Que levante la mano quien no haya tenido algún compañero, jefe o colaborador en su trabajo. Es tremendamente difícil no habértelo encontrado por el camino.

Una persona no es tóxica, sino que tiene ciertos comportamientos o conductas tóxicas en relación consigo misma, en el trabajo, con los amigos, con sus hijos, con su familia, etc. Puede mantener una relación estupenda en un entorno pero no en otro.

COMO DETECTAR UNA PERSONA TÓXICA

Las personas tóxicas en el trabajo son aquellas que generan a su alrededor un mal clima laboral y esto genera ansiedad, desgaste emocional, tristeza, apatía, desmotivación. 

Lo fundamental para detectar qué te está pasando es que cuando estés cerca de este compañero de trabajo sientas qué ocurre en tu cuerpo, a partir de ahí ya sabes que para ti es una persona tóxica.

También es importante que percibas si cuando estás ante esta persona tu comportamiento cambia, tu manera de relacionarte con el o ella es diferente a cualquier otro compañero. Y sobre todo detecta si es capaz de conseguir de ti conductas o comportamientos que no harías ante cualquier otra persona.

CUALES CON LAS CARACTERÍSTICAS DE LAS PERSONAS TÓXICAS:

• Tremendamente negativas, critican todo, la injusticia y la falta de equidad es su lema. Su posición de víctima, de estar quejándose todo el día hará que en realidad todo el mundo le excluyan o bien aparezca un salvador para cuidar de él. Su estado anímico suele contagiar mucho por lo que te sentirás lleno de apatía a su lado.
• Los correveidiles, aquellos que están todo el día de chismorreo y no se dedican a trabajar si no a contar a uno lo que quiere escuchar del otro o lo que le pasó ayer en la reunión. La rumorología es su objetivo en el trabajo, generando un mal ambiente, ya que generan incertidumbre e inseguridad.
• Los egoístas que sólo van a lo suyo, el trabajo en equipo no entra en su panorama laboral porque no saben. Probablemente te haga fracasar en tu trabajo de una manera sutil, si que te des cuenta, sin hacerte llegar las cosas a tiempo, manipulándote de manera pasiva, sin hablarte, sin contarte, …
• El trepa, que sólo va a lo suyo y está lleno de envidia de los demás. Desea aquello que tienen los demás y nunca estará a gusto con nadie. Sólo querrá destruir todo lo que tiene alrededor en su propio beneficio.
• El narcisista es el rey de la toxicidad. Yo le llamo el “porque yo lo valgo”. Es quien sabe más y no va a soportar que alguien le lleve la contraria o le diga que no a algo. Suele descalificar y despreciar. A la par puede ser un gran seductor para conseguir de ti lo que quiera en su propio beneficio. Si tu jefe es un o de estos muy probablemente merme tu autoestima y tu equilibrio emocional.
• El explotador, aquel que te exprimirá al máximo, con o sin seducción, pero sin implicarse emocionalmente con nadie. Sólo irá a conseguir su beneficio.

COMO LIDIAR CON ELLOS

• Lo primero es saber identificar su perfil, cómo es esa persona en función de lo descrito arriba, que le moviliza y qué tipo de conductas o comportamientos tiene. De esa manera sabrás a qué atenerte.
• Lo segundo es qué genera en ti. Tanto a nivel físico, con sensaciones corporales, a nivel emocional, con tus sentimientos, y a nivel conductual con tus comportamientos. A partir de aquí no debes sentirte culpable, sino simplemente has analizado lo que esa persona con relación a ti supone. Con estas dos primeras actuaciones estás tomando perspectiva.
• Lo importante son tus objetivos y tu valía profesional. Así que no te desvíes del tema. Al trabajo se va a trabajar, no eres el psicólogo de nadie y no es tu cometido cambiar a nadie. Ponle límites, sólo relaciónate con esta persona lo justo y necesario y en la medida de lo posible deja todo por escrito. Hasta ahora has demostrado tu valía profesional, por que lo que no dejes de hacerlo.
• Encuentra tu propio equilibrio emocional, con autorregulación continua. Si él sabe que te hace daño y entras en su juego, le estás aportando carnaza para continuar. Así que no hay mayor desestabilización para ellos que tu propio equilibrio. También le sacará de quicio el sentido del humor. Pero a veces no es tan fácil, por lo que si no puedes acude a un psicólogo cuanto antes.
• En la asertividad está la clave para mantenerle alejado. Es poder decirle desde el respeto a ti mismo y a él o ella lo que piensas. Lo importante es que no te sientas culpable, que lo hagas desde la autoestima y desde la honestidad.

Recuerda que cada persona tiene una personalidad y un estilo de relacionarse con los demás. Es normal que no te relaciones por igual con todo tipo de personas, ya que en función de su personalidad y de la tuya fluirá la energía de una manera o de otra. 

Si encuentras personas tóxicas en tu trabajo y sigues manteniendo una alta autoestima y un buen equilibrio emocional sabrás mantenerle al margen. Lo importante es que te centres en tu estilo personal, en tu valía y en tus objetivos.

Una persona no nace tóxica, sino que se comporta así, porque no sabe relacionarse de otra manera. Si una persona se hace consciente de que su forma de actuar es negativo y tóxico siempre podrá cambiarlo. 

Desde la compasión te será más fácil poder lidiar con esta situación.