Recuerdo una cliente que decía: – yo me tomo la pastilla del A mi plin y todo solucionado – y no es así.
Depende de reconectar con tu ser, sin esperar que nada ni nadie te haga feliz. No está fuera de ti, si no sabes ser feliz por ti mismo y dependes de agentes externos la vida será muy frustrante para ti.
A diario tenemos diferentes problemas y preocupaciones, pero el cómo te tomas la vida, tu actitud ante lo externo es lo importante. Porque de la misma manera a diario tenemos la oportunidad de conectar con pequeñas sensaciones que nos hagan sentir la felicidad: desde un masaje hasta la sonrisa de tu hijo.
Para ser feliz se requiere de una actitud muy concreta, además de otros factores, como el amor recibido, rodearte de buena gente, el autocuidado, etc.
El año pasado ya os di las claves para ser feliz y cómo tuvo bastante éxito este año os traigo algo más de información.
Hace años el doctor en psicología israelí Tal Ben-Shahar hizo de la felicidad y la psicología positiva una asignatura en la Universidad de Harvard, siendo todo un éxito ya que pasan por sus clases cerca de 1.500 alumnos al semestre.
Ben-Shahar defiende que la alegría se puede aprender a base de técnica y práctica. Quiero recordar que hace un par de semanas hablaba de esto en un post sobre la neuroplasticidad del cerebro: podemos cambiar nuestra forma de ver el mundo y de proporcionarnos bienestar y paz mental. Es por ello por lo que abogo en que la felicidad reside en ti, solo has de cultivarla.
Ben-Shahar ha revelado que existen una serie de patrones, que se repiten en todas las personas que aseguran ser felices.
Aprende a ser feliz. La hormona de la felicidad, la oxitocina, protege el corazón y aumenta el sistema autoinmune.
Se puede vivir de muchas maneras y ser feliz en cada una de ellas, ¿cómo quieres vivir?
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