06 / agosto / 2020
Hace unas semanas os explicaba cómo funcionaba la vocecita que llevamos dentro. Os expliqué cómo funcionaba a modo de radio en nuestra cabecita y que obedecía fundamentalmente a nuestro inconsciente.
Claramente en función de cómo nos hemos criado, qué nos han dicho, cuales son nuestros valores, qué experiencias nos ha tocado vivir, etc. así nos hablamos.
Si tenemos un buen equilibrio emocional y una buena autoestima nos hablaremos mucho mejor que cuando esto no se da.
Normalmente nos hablamos mucho peor en situaciones altamente estresantes o cuando el cansancio emocional nos abruma. Por tanto, es importante que aprendamos a manejar nuestra vocecita y la entrenemos en nuestro día a día y no esperar a encontrarnos ante esta situación para ponernos en marcha. Lo normal es que si lo intentamos en un momento de mucho desequilibrio y no lo llevamos ya interiorizado de antes es que no funcione. Es como si quieres correr este año la San Silvestre, si no entrenas unos meses antes no creo que puedas alcanzar la meta.
Alguna de las pautas que yo facilito en terapia son las siguientes:
- El poder de la hipnosis. En lugar de darle rienda suelta a tu vocecita, lleva la atención a tu inconsciente para conseguir lo que deseas. Con la hipnosis desde un lugar agradable, calmando el sistema nervioso central consigues llegar a tu inconsciente y desde ahí establecer nuevas experiencias, nuevos recursos que le sirvan para solventar tus problemas. La hipnosis te la puede hacer un terapeuta, como hago yo en consulta (siempre las grabo para que las tengáis de por vida), puedes aprender autohipnosis para conseguir llegar a ese estado cuando lo necesites (por ejemplo yo lo pongo en práctica a la hora de someterme a alguna intervención pequeña y así no sentir ni miedo ni dolor) o puedes escuchar aquellas que puedes adquirir o encontrar en diferentes medios, por ejemplo en mi tienda online (suelen ser temáticas pero también funcionan muy bien).
- Practica la meditación. Cada vez su práctica está más extendida y se conocen más sus beneficios. Existen muchas técnicas para aprender a meditar y puedes encontrar múltiples aplicaciones en el móvil que te ayudarán a meditar. Yo en concreto suelo recomendar una de las meditaciones más importantes de Kundalini Yoga, Sa-Ta-Na-Ma, ya que existen diversos estudios científicos que demuestran como su práctica aumenta el flujo sanguíneo cerebral en ciertas zonas, y cómo el área de la regulación hormonal, el hipotálamo-hipófisis, está más irrigada, algo muy positivo para la mejora cognitiva y el estrés. Por tanto, sus beneficios hacen que además de mejorar la memoria, reduzcas el estrés, la depresión y las adicciones. Consiste en repetir el mantra Sa-Ta-Na-Ma durante 12 minutos, podrás encontrar tutoriales en internet de cómo practicarla. Cuando tu vocecita está muy agitada sólo tienes que repetir este mantra y todo se calmará.
- Respira. El poder de la respiración es básico para aprender a autorregular tu cuerpo y tu mente. Pero casualmente cuando estamos ante una situación estresante y la vocecita está a tope, lo normal es que nuestro respirar se acorte e hiperventilemos. Pues en ese momento lo primero que debes hacer es realizar varias expiraciones largas e incluso bostezos. Luego puedes elegir el marco de una ventana y acompasar tu respirar con cada lado, comenzando a inspirar contando 1-2-3-4 según subes el lado de la ventana, contener la respiración 1-2 en la parte de arriba, soltar en 6 (1-2-3-4-5-6) según bajas el otro marco de la ventana, estar sin respirar en la parte de abajo y comenzar de nuevo.
- Atención focalizada. La idea consiste en llevar la atención al aquí y al ahora para callar la vocecita y reducir la ansiedad. Se basa en los tres medios sensoriales por los que percibimos el mundo: auditivo, kinestésico y visual. El procedimiento será como sigue: Fijar atención en 5 detalles visuales y decirnos: Miro…. letra “r” del cartel, la mancha del suelo, etc. Fijar atención en 5 detalles auditivos y decirnos: Escucho…. El sonido del coche a lo lejos, el cantar del ruiseñor, etc. Fijar atención en 5 detalles táctiles y decirnos: Noto…. el peso del reloj, la brisa en mi mejilla, etc. Cuando hayas terminado de hacerlo 5 veces con cada canal, lo haces 4, luego, 3, 2 y una vez. Si sigues nervioso aumenta de 1 a 5, a la inversa. Así hasta calmar tu mente.
- Hoponopono. Es un antiguo método de la filosofía hawaiana enfocado al perdón y la resolución de problemas. Se basa en que las personas repetimos sistemáticamente pensamientos tóxicos, pautas mentales y emociones negativas que provienen de nuestros ancestros, vidas pasadas y todo aquello que se adquiere en las experiencias (por tanto nuestra vocecita). A través de su práctica vas borrando patrones y reprogramando nuestra mente. El mantra más conocido del hoponopono consiste en repetir: Lo siento, perdóname, te amo, gracias. Cada palabra tiene un significado u objetivo diferente. Lo siento: asumir la responsabilidad de lo que se busca sanar. Perdóname: el cuerpo perdona al ser. Te amo: amor hacia la parte negativa de la persona. Gracias: agradecimiento por sanar el problema.
No es fácil explicar cada una de estas técnicas en tan poco tiempo, pero por lo menos os dejo unas pinceladas para que las vayas poniendo en práctica. Recuerda que lo importante es el entrenamiento, si no será imposible ponerlo en marcha cuando realmente lo necesites.
Os iré desarrollando un poquito más sobre cada una de estas técnicas.
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